Aparece la cerámica robada del nicho de Zuloaga Olalla

Un operario del cementerio se la ha encontrado este mediodía en la calle, apoyada en la puerta de la capilla y envuelta en una tela con una nota de aviso.

La cerámica que decoraba el nicho de Daniel Zuloaga Olalla (1922-2000), nieto del ceramista universal Daniel Zuloaga Boneta (1852-1921), ha aparecido en el mismo cementerio del Ángel de la Guarda; o más bien pegado a éste, apoyado en la puerta de la capilla, en la calle. El robo fue denunciado el pasado 30 de junio por Juan Daniel Zuloaga Khoyan, hijo de Zuloaga Olalla, tras ser avisado por un amigo, aunque en el camposanto se echaba en falta desde hacía “un mes o mes y medio”, según indicó entonces.

Ahora, sin embargo, la concejala responsable del cementerio, Ana Peñalosa, confirma a El Día que un operario se la ha encontrado en torno al mediodía de este lunes. “Estaba tapada con una tela y llevaba una nota que decía ‘para el cura de la capilla del cementerio’ o algo parecido. Ha corrido un poco la tela y ha visto que se trataba de la cerámica”, relata a El Día. El Ayuntamiento ya ha informado a la Policía, dado que había abierto una investigación, y también a la familia Zuloaga a través de quién denunció, Juan Daniel. “Parece que está en buen estado, pero no hemos querido tocar nada por si acaso”, precisa Peñalosa.

“La verdad es que se lo podía haber llevado cualquiera porque estaba en la calle, pegada a la puerta de la capilla”, advierte la concejala, pero afortunadamente ha sido personal del cementerio quien la ha visto a mediodía. “Suponemos que la habrán dejado esta noche porque ayer no estaba ahí”.

Se trata de un panel de azulejos de loza blanca de la década de 1910, tal y como describe el biznieto de Daniel Zuloaga Boneta, con colores en bajo-baño de esmalte transparente y con lustres-reflejos metálicos a tercer fuego. Representa el descendimiento de Cristo de la Cruz y se compone de piezas que fueron cocidas en los hornos de leña de San Juan de los Caballeros. Según Juan Daniel Zuloaga, la pieza es del taller de Daniel Zuloaga Boneta “ y posiblemente si no es obra del mismo Daniel, sería de su hijo Juan Zuloaga Estringana (1884-1968)”.

La tumba acoge los restos mortales de Daniel Zuloaga Olalla, profesor de la Escuela de Artes de la Casa de los Picos y fallecido en Segovia en 2000, así como de su madre, Rosa Olalla y de su abuela María García. Zuloaga Olalla, que durante décadas tuvo un taller cerámico en la Plaza de la Merced, que ahora regenta su hijo, quiso ser enterrado en esta sepultura, pese a que la familia Zuloaga cuenta con un mausoleo en otra zona del cementerio segoviano, donde se hallan los restos de Daniel Zuloaga Boneta.

Fuente: eldiadesegovia.es