Dentro del ciclo de actividades que organiza el Convento Madre de Dios de Sevilla, de monjas dominicas, el pasado jueves 1 de febrero ha tuvo lugar una conferencia sobre la azulejería de la iglesia conventual. Con una asistencia de más de 100 personas, muchas de las cuales eran socias de A.A.C. Niculoso Pisano, el conferenciante hizo un recorrido por los conjuntos azulejeros salidos de la mano o del círculo de Cristóbal de Augusta, ceramista aragonés que vino a Sevilla a finales del siglo XVI y que trabajó junto a Roque Hernández y con otro pintor destacado, Alonso García. Existió un parentesco entre estos tres personajes y sus trabajos fueron numerosos para la instituciones sevillanas, destacando los del Alcázar, así como los de varias iglesias y conventos (convento de San Clemente, iglesia de Santiago en Carmona, convento de Santa María de Jesús, iglesia de Santa Ana, Convento de Santa María de las Cuevas, convento de santa Clara, entre otros.)

El conferenciante se detuvo en describir unos de los frontales de altar y aledaños más importantes de Augusta, con escenas del apocalipsis (los cuatro jinetes, La Ramera, San Miguel con Satanás), recientemente restaurado y que no está completo aún. Es necesaria, comentaba Pleguezuelo, una intervención en el mismo frontal para incorporarle piezas que se encuentran mal ubicadas entre los zócalos de la iglesia y encimeras de altar.

El frontal está firmado pero no datado, pensando el conferenciante que podría datarse en 1577 por coetaneidad con un retablo de grandes dimensiones que existió en el compas del convento y que hoy se expone en el Museo Provincial de Bellas Artes de Sevilla, firmado por Augusta en esa fecha.

Otros de los elementos cerámicos atribuibles a Augusta son los arrimaderos decorados con motivos grutescos, de dibujos simétricos que se encuentran en las proximidades del altar de San Juan. Esta azulejería tiene un gran parecido, en diseños, colorido y técnica, con los zócalos del palacio gótico del Alcázar y la iglesia del convento de San Clemente. Sobre la encimera de este altar se aprecian piezas pertenecientes a unos paños con motivos grutescos que según el conferenciante no se encuentran en el lugar para el que inicialmente se diseñarían. Opina el profesor Pleguezuelo que el zócalo del presbiterio, hoy desnudo, pudo estar cubierto por estas piezas de grutescos, hoy diseminadas por otros espacios.

En esta misma capilla y altar de San Juan Bautista, se conservan colocados en la frontalera unos azulejos de patrón, con motivos de la cruz de san Juan en su composición. Son piezas bien diferentes a las que se emplean en el frontal del apocalipsis ya que no aparecen los fondos amarillos propios de Augusta.

En la iglesia se conserva otra azulejería, también de patrón, distribuida por otras capillas, encimeras de altar, zócalos y coro bajo.

Se detuvo el conferenciante en resaltar otros elementos existentes en la iglesia así como la importante colección de sepulturas de mármol sobre una solería original de ladrillos rojos acompañados de olambrillas.

Interesante conferencia que agradó al numeroso público asistente.