Sevilla. Acción vecinal para salvar un retablo cerámico de Orce en El Retiro Obrero

Comienzan los trabajos para recuperar un azulejo de 1931 en la fachada de la iglesia del barrio.La parroquia y la asociación Ben Baso colaborarán junto con la Asociación Histórica Retiro Obrero para sufragar su restauración y evitar su pérdida.

El barrio de Retiro Obrero se ha movilizado una vez más para salvar su patrimonio. En esta ocasión el foco de la Asociación Histórica Retiro Obrero (AHRO) se ha puesto en un azulejo mural que decora la fachada de la parroquia del barrio, una obra de Enrique Orce, uno de los mejores ceramistas de Triana de los años 30.

Los andamios ya están colocados y han sido los restauradores José Ramón Pizarro y Carmen Riego quienes han diagnosticado el estado del retablo. «Pensábamos que el daño era leve, pero una vez hecho el estudio se han visto carencias que requieren un trabajo más amplio», explica Basilio Moreno, representante de la AHRO, que ha tomado la iniciativa y que ha implicado a los miembros del templo, a través del párroco Israel Risquet, y a los de la Asociación de profesores para la defensa y difusión del patrimonio Ben Baso.

Estos tres colectivos se harán cargo de la restauración, que requiere un presupuesto de 3.436,40 euros. Según explica Moreno, los restauradores trabajaran durante un mes aproximadamente en la fachada de la parroquia.

En el retablo se escenifica el hogar de Jesús de Nazaret y se representa a la Sagrada Familia: el padre trabajando en el taller de carpintería, el hijo ayudando y la madre cosiendo sentada a la izquierda. Esta escena cotidiana fue recreada por el ceramista Enrique Orce en un retablo enmarcado en un óvalo vertical rodeado de una orla de molduras y estética barroca sobre un conjunto vegetal de flores, hojas y cintas con fondo azul cobalto.

El panel está compuesto por diez hileras de azulejos de 27,5 centímetros de ancho por 14 de alto recortados en sus extremos. En total son 81 piezas, de las que una se ha perdido, otra está rota por la mitad y una se ha colocado al revés. El azujelo necesita una limpieza, así como la restauración de la pasta cerámica y el vidriado, entre otras actuaciones.

La AHRO ha hecho un llamamiento a los vecinos del barrio para que, cuando la intervención concluya, conozcan con más detalle este patrimonio y la importancia de protegerlo.